sábado, 6 de diciembre de 2025

P. José Francisco Rodríguez. Desde la orilla de Dios (VII)

 

P. José Francisco Rodríguez.


Se nace a esta vida llorando y se muere llorando. Si a la criatura que está para nacer se le preguntara si prefería nacer o quedarse en el seno materno, de seguro que diría que prefería seguir en el seno materno. Menos mal que nuestras madres si que sabían que lo bueno para nosotros no era vivir siempre en su seno, sino darnos a luz, y así es que logramos nacer.

Menos mal también, que Dios Padre sabe que es mejor vivir en la vida que Él nos tiene preparada para el cielo, que en la que ahora vivimos, y a la que estamos tan apegados, y aunque nos resistimos a nacer a esa vida, como se resiste a nacer el niño antes de nacer, mirando el bien nuestro, da paso a nuestro nacimiento a esta vida, para que en su día podamos nacer para la otra.

Mientras vivimos en la tierra nos acostumbramos tanto a vivir en la tierra, que nos cuesta lo indecible morir a esta vida para nacer a la otra, siendo ésta incomparablemente mejor. El hecho es que nacemos para esta vida llorando, y nacemos para la otra también llorando, pero para nuestro bien,  tanto en un caso como en el otro, ya que si es para nuestro bien el haber nacido para esta vida, es incomparablemente mayor bien, nacer para la otra, como así lo esperamos, confiados en la bondad de Dios nuestro Padre.




miércoles, 3 de diciembre de 2025

Testimonios. P. Jacinto María (VII)

 

P. Jacinto María.



Armas victoriosas

Escribe San Alfonso María: “Todos saben que mediante los sacramentos y en especial los de la Penitencia y de la Eucaristía, se nos comunican las gracias que el Redentor nos mereció”.

La experiencia cotidiana enseña que cuantos reciben frecuentemente estos, perseveran constantes en la gracia de Dios. Quienes comulgan frecuentemente, ¡cuánta fuerza reciben para resistir las tentaciones! La sagrada Eucaristía se llama “pan celestial” para que comprendamos que así como el pan material con la vida del cuerpo, así la comunión conserva la vida del alma, que es la divina gracia.

El segundo medio eficaz para vencer las tentaciones es la oración hecha a Dios por los méritos de Jesucristo. “Cualquier cosa que pidiereis en mi nombre, eso haré; así la gloria del Padre se manifestará en el Hijo. Lo que pidáis unidos a Mí, Yo lo haré”. (Jo. 14, 13-14) Así pues, todo cuanto pidamos a Dios en nombre de Jesucristo, es decir, por sus merecimientos, lo alcanzaremos.




sábado, 29 de noviembre de 2025

Habla Víctor Carta 4 a religiosa agustina (VII)

Monasterio de agustinas recoletas de la Purísima Concepción
en Pamplona.



Te manifiesto que por mi parte, cuanto más lucho en este canino, más imperfecto me veo.  El amor a Dios no puede tener límite, ya que Él es ilimitado. Pero repito: no es el que se siente, sino el que se lucha por tener: el primero no está en nuestras manos, el segundo sí, porque es amor de voluntad, este empieza en el alma y termina en Dios y da mucho fruto en la Iglesia. El sensible, empieza en el alma y termina en ella”.


Efectivamente, el amor que podamos tener a Dios en esta vida, por muy grande que sea, siempre puede crecer hasta el momento de nuestra muerte. Pero lo que llama la atención es lo que dice del amor sensible y del amor de voluntad. Para hacer estas afirmaciones, se basa, en doctrina de San Juan de la Cruz, que en Subida del Monte Carmelo. Libro 2, capítulo 22, nº, 19, da este consejo a los directores espirituales:


Encamínenlas en la fe, enseñándolas buenamente a desviar los ojos de todas aquellas cosas, y dándoles doctrina en cómo han de desnudar el apetito y el espíritu de ellas para ir adelante, y dándoles a entender cómo es más preciosa delante de Dios una obra o acto de voluntad hecho en caridad, que cuantas visiones y revelaciones y comunicaciones puedan tener del cielo, pues estas ni son mérito ni demérito; y cómo muchas almas, no teniendo cosas de estas, están sin comparación mucho más adelante que otras que tienen muchas”.





sábado, 22 de noviembre de 2025

Solemnidad de Cristo Rey.

Cristo Rey del universo.

Con la Solemnidad de Cristo Rey del universo, concluye el año litúrgico,  que no coincide con el año civil. A lo largo de cada año litúrgico se hace un recorrido por toda la historia de la salvación, que comienza con el Adviento, continúa con la Navidad, Cuaresma, Pascua de Resurrección, Pentecostés y concluye con esta celebración de Cristo Rey del universo.

 Cuando los judíos llevaron a Jesús ante Pilatos para que le condenara a muerte por proclamarse rey contra el Cesar, le preguntó a Jesús: ¿Tú eres Rey? Jesús le contestó: “Tú lo dices: soy Rey. Yo para eso he nacido y para esto he venido al mundo: para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad, escucha mi voz”. (Jo. 18, 36-37).

 En el prefacio de este día se nos dice que su reino, “es un reino eterno y universal; el reino de la verdad y la vida, el reino de la santidad y la gracia. El reino de la justicia, el amor y la paz”.

 Santa Teresa de Jesús, comentando las palabras del Credo, “venga a nosotros tu reino”, hace esta reflexión: “El gran bien que me parece a mí hay en el reino del cielo, es ya no tener cuenta con cosa de la tierra, sino un sosiego y gloria en sí mismos, que les viene de ver que todos santifican y alaban al Señor y bendicen su nombre y no le ofende nadie; todos le aman y la misma alma no entiende en otra cosa sino en amarle, ni puede dejarle de amar, porque le conoce”. (C. 30, 5)


miércoles, 19 de noviembre de 2025

Testimonios. (VI) P. Jacinto María

 

P. Jacinto María


4. Conformidad con la voluntad de Dios. Continuación.

Santa Teresita, en cada sufrimiento aviva su fe en el Amor paternal de Dios, como una expresión del Amor, porque es manifestación de la voluntad divina. Escribe: “¿Cómo es posible que Dios, amándonos tanto, infinitamente, se goce en hacernos sufrir?”. Y añade sin vacilar: “No, no puede gozarse en nuestro dolor. Lo permite, pues, como a pesar suyo”.

Ejemplo tenemos en la mamá que tiene que asear a su bebé. Sabe que le va a hacer sufrir… Lo hace a pesar suyo, para bien de su criatura. El pequeño no lo entiende.

Víctor ha considerado profundamente lo que dice San Pablo en Colosenses 1, 24: “Sufro en mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo por su Iglesia. Ahora me alegro de mis sufrimientos por vosotros”.

Escribe Víctor en un breve comentario Acerca del sufrimiento: “Alegría de penetrar en el sentido salvífico del sufrimiento. Es esencial a la naturaleza del hombre, tan profundo como este es inseparable de él… El sufrimiento es más vasto que el producido por la enfermedad. Abarca cuerpo y espíritu.

Normal en el alma en peligro de muerte de los padres, de los hijos…, la hostilidad del ambiente, la irrisión y escarnio hacia quien sufre la soledad y abandono. El no comprender porqué los malos prosperan y los justos sufren. La ingratitud de amigos y vecinos, y más si son familiares.




Habla Víctor Carta 4 a religiosa agustina (VI)

 
Una comunidad de religiosas Agustinas Recoletas


“La santidad es la mejor inclinación que puedes tener, es el único y verdadero camino a seguir, el fruto debe de ser el que expresas: inclinación a obediencia, trabajos y humildad. Este es el camino verdadero, la meta es la caridad perfecta, esta no admite remilgos en ningún momento”.

Víctor felicita a esta religiosa agustina porque, en carta que no conocemos, le habría manifestado su deseo de conseguir la santidad. En la respuesta le da a entender que para alcanzarlo, tiene que recorrer un arduo camino hasta conseguir esa preciosa joya de la santidad.

Entre los obstáculos que tendrá que superar menciona la obediencia, los trabajos y la humildad. Acerca de la obediencia dice San Juan de la Cruz en la segunda cautela contra el demonio: “Jamás mires al prelado con menos ojos que a Dios, sea el prelado que fuere, pues le tiene en su lugar, y advierte que el demonio mete mucho aquí la mano”.

Acerca del trabajo, tiene Santa Teresa estas preciosas palabras en Camino de Perfección 7, 9: “Es muy buena muestra de amor en procurar quitarlas de trabajo y tomarle ella para sí en los oficios de casa”.

Y la misma Santa, tiene esta definición de la humildad: “Humildad es andar en verdad; que lo es muy grande no tener cosa buena de nosotros, sino la miseria y ser nada; y quien esto no entienda, anda en mentira”.



miércoles, 12 de noviembre de 2025

P. José Francisco Rodríguez Desde la orilla de Dios (5)

 

P. José Francisco Rodríguez


No es más feliz el que más dinero tiene, sino el que tiene más amor de Dios. La riqueza que cuenta ante Dios, es la del amor a Dios y del amor a los hermanos.

Cuando Jesús habló de las dificultades que tienen los ricos para entrar en el Reino de los cielos, no trató de hacer demagogia. Para Jesús las riquezas pueden ser buenas o malas. Son malas si se usan para malos fines. Son buenas si se las utiliza para fines buenos.

¿No eres Tú, Señor, quien manda en mi vida? Pues si eres Tú quien manda en mi vida, que se note que eres Tú quien manda en mi vida. ¿Y como se nota? Haciendo o no haciendo lo que Él nos manda. Lo único que tiene valor ante Dios, es el amor con el que hacemos lo que hacemos por amor de Dios y de los hermanos.

Evangelizan los que proclaman el evangelio, y no evangelizan los que, cuando predican el evangelio, en lugar de predicar el evangelio se predican a sí mismos.

Felices los que se dieron cuenta a tiempo y empezaron a tiempo a dar sentido a la vida. Dichosos los que buscaron a tiempo el sentido de su vida en Dios, que es el único que da sentido a nuestra vida.





sábado, 8 de noviembre de 2025

Testimonios P. Jacinto María (V)

 

  P. Jacinto María


4. Conformidad con la voluntad de Dios.

Finalmente, quien desea santificarse, no debe querer más que lo que Dios quiere. Todo nuestro bien consiste en unirnos a la voluntad de Dios.

 

Santa Teresa decía: “Toda pretensión de quien comienza oración –y no se olvide esto, que importa mucho- ha de ser trabajar y determinarse y disponerse con cuantas diligencias pueda, a hacer su voluntad conforme con la de Dios, y estad muy ciertas que en esto consiste toda la mayor perfección que se puede alcanzar en el camino espiritual”.

 

Pero nótese, que el mérito consiste en conformarnos con la voluntad de Dios, no tanto en las cosas que nos son gratas, cuanto en las que son contrarias a nuestro amor propio; esta es la piedra de choque del amor que profesamos a Dios.

 

Estos males pueden proceder directamente de Dios, como enfermedades, reveses de fortuna, pérdida de parientes y amigos.

 

También nos debemos conformar con la voluntad de Dios en los males que nos vienen  indirectamente de Dios, es decir, por medio de los hombres; tales males los quiere Dios en el sentido de que nada sucede sin su voluntad, como las injusticias, las maledicencias, las calumnias, las injurias y toda especie de persecuciones. Dios no quiere el pecado de estos tales, pero quiere que suframos la pérdida de intereses, la humillación, y quiere también que nos conformemos con su voluntad. (A. II BAC, 316)

 

miércoles, 5 de noviembre de 2025

Habla Víctor Carta 4 a religiosa agustina (V)

La sierva de Dios Madre Mariana de San José


“Ten en cuenta que ninguna gracia que Dios envía en sentido, por alta que sea, es el mismo Dios; a lo que de verdad se debe aspirar, a esto solo se llega por negación total, tanto de bienes materiales, morales, espirituales. Muy rica es el alma que no se inclina a regalos. Tenemos que vender todo lo que tenemos, dárselo a los pobres y negarnos a nosotros mismos. Por esto repito que se deben pasar pasivamente, ya que Dios entero, no se da más que en fe desnuda y amor”.


San Juan de la Cruz, en el Libro segundo de “Noche oscura”, en el capítulo 23, explica como todas las comunicaciones que Dios hace a las almas a través de ángeles, por muy íntimas que sean, puede conocerlas el demonio, y por tanto puede disfrazarse de ángel, para confundir y engañar a las almas.

Estas son sus palabras:


“Cuando visita Dios al alma por medio del ángel bueno, en lo cual no va ella totalmente a oscuras y en celada que no le alcance algo el enemigo. Pero cuando Dios por sí mismo la visita, entonces se verifica bien el dicho del verso; porque totalmente a oscuras y en celada del enemigo recibe las mercedes espirituales de Dios. La causa es porque, como Su Majestad mora sustancialmente en el alma, donde ni ángel ni demonio pueden llegar a entender lo que pasa, no puede conocer las íntimas y secretas comunicaciones que entre ella y Dios allí pasan. Estas, por cuanto las hace el Señor por sí mismo, totalmente son divinas y soberanas, porque todos son toques sustanciales de divina unión entre el alma y Dios, en uno de los cuales, por ser este el más alto grado de oración que hay, recibe el alma mayor bien que en todo el resto”.


Habla Víctor Carta 4 a religiosa agustina (V)

La sierva de Dios Madre Mariana de San José,
fundadora de las agustinas recoletas.


“Ten en cuenta que ninguna gracia que Dios envía en sentido, por alta que sea, es el mismo Dios; a lo que de verdad se debe aspirar, a esto solo se llega por negación total, tanto de bienes materiales, morales, espirituales. Muy rica es el alma que no se inclina a regalos. Tenemos que vender todo lo que tenemos, dárselo a los pobres y negarnos a nosotros mismos. Por esto repito que se deben pasar pasivamente, ya que Dios entero, no se da más que en fe desnuda y amor”.

San Juan de la Cruz, en el Libro segundo de “Noche oscura”, en el capítulo 23, explica como todas las comunicaciones que Dios hace a las almas a través de ángeles, por muy íntimas que sean, puede conocerlas el demonio, y por tanto puede disfrazarse de ángel, para confundir y engañar a las almas.

Estas son sus palabras:

“Cuando visita Dios al alma por medio del ángel bueno, en lo cual no va ella totalmente a oscuras y en celada que no le alcance algo el enemigo.

Pero cuando Dios por sí mismo la visita, entonces se verifica bien el dicho del verso; porque totalmente a oscuras y en celada del enemigo recibe las mercedes espirituales de Dios. La causa es porque, como Su Majestad mora sustancialmente en el alma, donde ni ángel ni demonio pueden llegar a entender lo que pasa, no puede conocer las íntimas y secretas comunicaciones que entre ella y Dios allí pasan. Estas, por cuanto las hace el Señor por sí mismo, totalmente son divinas y soberanas, porque todos son toques sustanciales de divina unión entre el alma y Dios, en uno de los cuales, por ser este el más alto grado de oración que hay, recibe el alma mayor bien que en todo el resto”.




sábado, 1 de noviembre de 2025

Solemnidad de todos los Santos

Multitud de santos alabando al Señor

Celebramos en este día la fiesta de todos los santos, una inmensa muchedumbre formada por miríadas y miríadas de hermanos nuestros que abrazaron y siguieron las enseñanzas del Divino Maestro e imitaron su vida y ya están gozando para siempre en el cielo. Entre estos santos se encuentran muchos familiares y amigos nuestros ya fallecidos.

Según San Bernardo, “el primer deseo que promueve el recuerdo de los santos es el de gozar de su compañía, tan deseable, y de llegar a ser conciudadanos y compañeros de los espíritus bienaventurados… Nos espera la Iglesia de los primogénitos, y nosotros permanecemos indiferentes; desean los santos nuestra compañía, y nosotros no prestamos atención… Resucitemos con Cristo, busquemos los bienes de arriba, pongamos nuestro corazón en los bienes del cielo.

El  que en nosotros la conmemoración de los santos que, como a ellos, también a nosotros se nos manifieste Cristo, que en nuestra vida, y que nos manifestemos también nosotros con Él, revestidos e gloria… Deseemos, pues, esta gloria con un afán seguro y total. Mas, para que nos sea permitido esperar esta gloria y aspirar a tan gran felicidad, debemos desea también, en gran manera, la intercesión de los santos, para que ella nos obtenga lo que supera nuestras fuerzas”.

miércoles, 29 de octubre de 2025

P. José Francisco Rodríguez. Desde la orilla de Dios (4)

 

P. José Francisco Rodríguez

No es más feliz el que más dinero tiene, sino el que tiene más amor de Dios. La riqueza que cuenta ante Dios, es la del amor a Dios y del amor a los hermanos.

Cuando Jesús habló de las dificultades que tienen los ricos para entrar en el Reino de los cielos, no trató de hacer demagogia. Para Jesús las riquezas pueden ser buenas o malas. Son malas si se usan para malos fines. Son buenas si se las utiliza para fines buenos.

¿No eres Tú, Señor, quien manda en mi vida? Pues si eres Tú quien manda en mi vida, que se note que eres Tú quien manda en mi vida. ¿Y como se nota? Haciendo o no haciendo lo que Él nos manda. Lo único que tiene valor ante Dios, es el amor con el que hacemos lo que hacemos por amor de Dios y de los hermanos.

Evangelizan los que proclaman el evangelio, y no evangelizan los que, cuando predican el evangelio, en lugar de predicar el evangelio se predican a sí mismos.

Felices los que se dieron cuenta a tiempo y empezaron a tiempo a dar sentido a la vida. Dichosos los que buscaron a tiempo el sentido de su vida en Dios, que es el único que da sentido a nuestra vida.






sábado, 25 de octubre de 2025

Testimonios P. Jacinto María (IV)

 

 P. Jacinto María de la Cruz

3º. Presencia de los dolores y humillaciones

En tercer lugar, el que quiere santificarse tiene que estar presto a sufrir en paz y por Dios la pobreza, las humillaciones, la enfermedad, todo, incluso la muerte.

El Apóstol escribió: “Glorificad a Dios en vuestro cuerpo”. Estas palabras las comenta sí el abad Gilberto: “San Pablo quiere que llevemos a Cristo,  pero gloriosamente, no con tristeza ni quejas; que le llevemos, no que le arrastremos a la fuerza”.

El alma no demuestra su amor a Dios aceptando los consuelos, sino los  dolores y humillaciones, como dijo nuestro Redentor cuando salió al encuentro de los soldados que iban a prenderlo para darle muerte:

“Conviene que el mundo conozca que yo amo al Padre y que según el mandato que me dio, así hago. “Levantaos. Vámonos de aquí”…..

Víctor demostró bien su amor a Dios aceptando los dolores y humillaciones. No sólo aceptando las contradicciones, sino amando a los enemigos, como dice San Paulino, citado por San Alfonso María de Ligorio en la Monja Santa, cap. 12: “Amar a los enemigos es la venganza de los santos”. Amando, alabando y haciendo bien a los que los hacían mal es como se vengaban los santos. Además, el que perdona al enemigo, tiene la seguridad de que Dios le perdona. (Lc. 6, 26).

Pero si otra cosa no podéis, rezad, por lo menos, por todos aquellos que os han ofendido y encomendarlos a Dios con todo fervor, como nos lo recomienda el divino Maestro: “Rezad por los que os persiguen” (Mt. 5, 44).




miércoles, 22 de octubre de 2025

Habla Víctor Carta 4 a religiosa agustina (V)

 

La sierva de Dios Madre Mariana de San José,
fundadora de las agustinas recoletas.


“Ten en cuenta que ninguna gracia que Dios envía en sentido, por alta que sea, es el mismo Dios; a lo que de verdad se debe aspirar, a esto solo se llega por negación total, tanto de bienes materiales, morales, espirituales. Muy rica es el alma que no se inclina a regalos. Tenemos que vender todo lo que tenemos, dárselo a los pobres y negarnos a nosotros mismos. Por esto repito que se deben pasar pasivamente, ya que Dios entero, no se da más que en fe desnuda y amor”.

San Juan de la Cruz, en el Libro segundo de “Noche oscura”, en el capítulo 23, explica como todas las comunicaciones que Dios hace a las almas a través de ángeles, por muy íntimas que sean, puede conocerlas el demonio, y por tanto puede disfrazarse de ángel, para confundir y engañar a las almas.

Estas son sus palabras:

“Cuando visita Dios al alma por medio del ángel bueno, en lo cual no va ella totalmente a oscuras y en celada que no le alcance algo el enemigo.

Pero cuando Dios por sí mismo la visita, entonces se verifica bien el dicho del verso; porque totalmente a oscuras y en celada del enemigo recibe las mercedes espirituales de Dios. La causa es porque, como Su Majestad mora sustancialmente en el alma, donde ni ángel ni demonio pueden llegar a entender lo que pasa, no puede conocer las íntimas y secretas comunicaciones que entre ella y Dios allí pasan. Estas, por cuanto las hace el Señor por sí mismo, totalmente son divinas y soberanas, porque todos son toques sustanciales de divina unión entre el alma y Dios, en uno de los cuales, por ser este el más alto grado de oración que hay, recibe el alma mayor bien que en todo el resto”.




Habla Víctor. Carta 4 a una religiosa agustina (IV)

 

San Juan de la Cruz:
"Subida del Monte Carmelo"


Las pruebas de amor sensible las envía el Señor por la flaqueza del alma, sin estas no aguantaría estar siempre en oscuridad. No olvides que todo lo que es sensible, no le pasa desapercibido a Satanás y siempre se aprovecha de ello. Si el Señor lo envía, aceptarlo pasivamente, nunca procurarlo, por ese camino son engañadas muchas almas. Es claro manifiesto cuando se tiene, quedar inclinada a humildad; las que son del demonio dejan intranquilidad e inclinada en soberbia.

 

A todos los lectores que tengan a mano las obras completas de San Juan de la Cruz, las recomiendo que lean detenidamente el capítulo 11 del libro segundo de Subida del Monte Carmelo en que trata con toda claridad acerca de las manifestaciones extraordinarias que las personas espirituales pueden recibir a través de los cinco sentidos, advirtiendo que pueden ser de Dios o del diablo. Por eso recomienda que rechacen todas, pues si son del diablo, terminarán  creyéndose mejores y soberbias; si son de Dios ya han hecho su efecto y aumentarán su humildad. Allí encontrarán como resumen estas palabras:

 

Por tanto, siempre conviene al alma desecharlas a ojos cerrados, sean de quien fueren. Porque, si no lo hiciese, tanto lugar daría a las del demonio, y al demonio tanta mano, que no sólo a vueltas de unas recibiría las otras, mas de tal manera irían multiplicándose las del demonio y cesando las de Dios, que todo se vendría a quedar en demonio y nada de Dios; como ha acaecido a muchas almas incautas y de poco saber, las cuales de tal manera se aseguraron de recibir estas cosas, que muchas de ellas tuvieron  mucho que hacer en volver a Dios en pureza de la fe, y muchas no pudieron volver, habiendo ya el demonio echado en ellas raíces. Por eso es bueno cerrarse a ellas y negarlas todas, porque en las malas se quitan los errores del demonio, y en las buenas el impedimento de la fe, y coge el espíritu el fruto de ellas”.




sábado, 18 de octubre de 2025

Gracias y favores María Mercedes Diago Ceinos (2)

 

Galería museo del Cerrato en Baltanás (Palencia)

Esta situación nos tenía especialmente preocupados a mi marido y a mí, y viendo que con consejos no conseguíamos nada, decidimos encomendar el asunto al Señor por mediación de Víctor Rodríguez, del que somos muy devotos y tenemos conocimiento de su poder de intercesión ante el Señor. Y pidiéndole y pidiéndole y pidiéndole y pidiéndole estábamos al Señor por mediación de VÍCTOR, cada vez con más fe y con más confianza, cuando al fin, mi sobrina nos dio la noticia tan gozosa para nosotros, de que su pareja y ella habían decidido bautizar al hijo, y que se había comprometido a bautizarle nada menos que el ex Obispo de Palencia D. Nicolás Castellanos, a quien, como queda indicado, había ayudado como voluntaria en la obra social que estaba llevando a cabo en Bolivia.

 

Llegada la fecha y la hora señalada para el bautismo, allí estábamos todos llenos de contento para asistir a la ceremonia y  allí se presentó el Sr. Obispo D. Nicolás para celebrar el  bautizo del hijo de mi sobrina. Pero antes de celebrarle, dirigiéndose a los asistentes a la ceremonia nos dijo: Tengo que darles una muy buena noticia, y la noticia que nos dio fue que, en aquel mismo acto, no se iba a celebrar solo el bautismo del hijo, sino que se iba a celebrar también el matrimonio por la Santa Madre Iglesia de sus padres, como así lo hizo.

 

Primero casó por la Iglesia a sus padres y después les bautizo al hijo, con lo cual nuestro gozo fue completo. Y tan llenos de gozo estábamos y seguimos estando, que dimos gracias a Dios y no dejaremos nunca de dar gracias a Dios por habernos concedido gracia tan grande. Y dimos gracias a VÍCTOR, y no nos cansaremos nunca de dar gracias a VÍCTOR por su valiosa intercesión.

 

Y para que conste  lo firmamos mi marido y yo de nuestro puño y letra en Baltanás, a 18 de octubre de 2017.

 

 

María Mercedes Diago Ceinos                        Juan José Nieto Carranza

miércoles, 15 de octubre de 2025

Solemnidad de Santa Teresa de Jesús

Cristo vivo enseñando a Santa Teresa.

Celebramos hoy la solemnidad de Santa Teresa de Jesús, la primera mujer que, gracias a sus magistrales enseñanzas y experiencias místicas, consiguió que la Iglesia rompiera con la tradición que se resistía a reconocer oficialmente que una mujer pudiera enseñar en la Iglesia. Fue el Papa Pablo VI quien reconoció oficialmente su luminoso y fecundo magisterio declarándola doctora de la iglesia universal el día 27 de septiembre de 1970.

 

Pero para los carmelitas descalzos, no es solamente la doctora de la Iglesia, sino principalmente la madre fundadora, que a través de la oración y la práctica de las virtudes nos lleva a descubrir y experimentar el amor misericordioso de Dios.

 

Víctor, como “Terciario Carmelita”, como se denominaban entonces a los seglares, y posteriormente “Carmelitas descalzos seglares”, hizo su profesión en Medina del Campo el año 1958 con estas palabras: “Yo, hermano Víctor, hago mi profesión y prometo a Dios, a la Santísima Virgen María del Monte Carmelo, a nuestra madre Santa Teresa y a los Superiores de la Orden, obediencia y castidad, conforme a la Regla de la Orden Tercera, la cual quiero observar con la mayor perfección posible hasta la muerte”. Y cumplió fielmente con este compromiso. Por eso alcanzó la santidad.

 


sábado, 11 de octubre de 2025

P. José Francisco Rodríguez. Desde la orilla de Dios (3)

El P. José Francisco Rodríguez
el día de su profesión religiosa
en Segovia.


Contra Dios no hay quien pueda. Los enemigos de Dios nada pueden contra Dios. ¿Qué daño puede hacer a la luna que la ladren los perros? Pues menos daño pueden hacer a Dios los que “ladran” a Dios, que eso es lo que hacen con Dios los que luchan contra Dios.

No es lo mismo decir que los padres aman a sus hijos, que decir que nuestros padres nos quieren a nosotros, porque nosotros somos hijos suyos.

No es lo mismo que otros nos digan que Dios es nuestro Padre, que saber nosotros que Dios es nuestro Padre por tratarnos como hijos queridísimos suyos.

Todo lo que Dios ha hecho, hace y seguirá haciendo por nosotros, lo ha hecho, lo hace y lo seguirá haciendo porque nos quiere. El Señor nos habla, porque nos quiere. El Señor nos escucha, porque nos quiere. El Señor se desvive por nosotros, porque nos quiere. El Señor ha sufrido lo que ha sufrido por nosotros, porque nos quiere. El Señor ha muerto por nosotros y ha muerto por nosotros de la forma que ha muerto, porque nos quiere. El Señor ha resucitado para resucitarnos, porque nos quiere. El Señor quiere llevarnos con Él al cielo para que seamos eternamente felices a su lado, porque nos quiere. Todo lo que el Seño ha hecho, hace y seguirá haciendo por nosotros, es porque nos quiere, a más imposible.

P. José Francisco Rodríguez Desde la orilla de Dios (2)

El P. José Francisco Rodríguez
el día de su profesión religiosa
en Segovia.



Dios está a nuestro servicio desde siempre y para siempre. Dios, desde toda la eternidad dispuso que todas las cosas concurrieran para que fueran nuestros padres los que nos dieran la vida, para que naciéramos el año que nacimos, la hora que nacimos, el momento preciso en que nacimos, y el lugar donde nacimos; y dispuso también que no nos faltara nunca nada desde nuestro nacimiento hasta el presente, poniendo a nuestro cuidado las personas que hasta ahora ha puesto a nuestro cuidado, y tiene dispuesto que no nos faltará nada desde ahora hasta el final de nuestra vida, poniendo a nuestro cuidado, desde ahora hasta el final de nuestra vida a las personas que Él tiene previsto que cuiden de nosotros desde ahora hasta el final de nuestra vida terrena. De ahí en adelante, ya no se ocupara de nosotros por medio de nadie, sino que será Él, el que se ocupará de servirnos por eternidad de eternidades. ¡Así de bueno es Dios con nosotros.

 

Nosotros no somos los que nos salvamos por las obras buenas que hacemos, sino que es Dios quien nos salva, pues Él es el que hace en nosotros las obras buenas que hacemos, y luego nos las premia como si las hiciéramos nosotros. Así de bueno y de generoso es Dios con nosotros. Tan bueno es Dios con nosotros, que no se deja ganar nunca en amor, ni por nosotros ni por nadie.





miércoles, 8 de octubre de 2025

Testimonios P. Jacinto María (III)


2º. Intención de agradar en todas las cosas.

En segundo lugar, el que quiera santificarse, debe hacer cuanto hiciere por agradar a Dios. Todas sus palabras, todos sus pensamientos, todos sus deseos y todas sus obras, no han de ser más que un acto de amor a Dios. “Si tu ojo estuviere bueno, decía Jesucristo, todo tu cuerpo estará iluminado”. Por ojos entienden los Santos Padres la intención. Así decía San Agustín; “La intención es la que hace buena a la obra” (AII BAC. 310).

 

En Víctor, esta intención está considerada en la Biografía: “Vida impactante de un cristiano de a pie, Víctor Rodríguez Martínez”. Capítulo 7 en el apartado “amor a los pobres”, en que, después de mencionar varios casos, concluye diciendo: “Esto por poner algunos ejemplos. Lo cierto es que no podía ver a un pobre que le pidiera o que viera pidiendo limosna que dejara de socorrerles con todo amor, por amor a los pobres y por amor a Jesús, a quien veía en los pobres”. Y lo mismo hacía con los enfermos.

 

Pues amar al prójimo por caridad –escribe San Francisco de Sales- “es amar a Dios en el hombre, o al hombre en Dios; es querer a Dios solo por su amor y a la criatura por su amor también”. Y añade el santo: “El colmo del amor a la divina Bondad del Padre celestial, consiste en la perfección del amor a nuestros hermanos y compañeros”.

 

San Juan de la Cruz lo explica detalladamente: “…ha de advertir el cristiano, que el valor sus buenas obras… no se funda tanto en la cantidad y cualidad de ellas, sino en el amor de Dios que él lleva en ellas; y que entonces van tanto más calificadas, cuanto con más puro y entero amor de Dios van hechas y menos él se quiere interesar acá y allá de ellas, de gozo, gusto, consuelo y alabanza… recoger el gozo a Dios, deseando servirle con ellas en escondido, sin ningún otro respecto y jugo que honra y gloria de Dios”. (Subida, L. III, c, 27, 5).

 

Decía Víctor en una de sus “charlas”: “La caridad no tiene medida… Amarás a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente; o sea, con todo tu ser… Vela en todo momento para que todo tu ser esté amando a Dios”.


sábado, 4 de octubre de 2025

Habla Víctor. Carta 4ª a una religiosa agustina (III)

 

 Libro de la Subida del Monte Carmelo
de San Juan de la Cruz.

El frío, ayuno y penitencias son muy importantes, pero lo son más las mortificaciones de los sentidos, aún más los del alma.

La oración contemplativa, la más eficiente, es la que se hace en fe. No olvides que aunque para el alma es oscura, para el demonio es tiniebla. Por tanto, en humildad y sin hacer nada ni enterarse, se deja gobernar y enseñar el alma por el Espíritu Santo; Este la enseña ciencia muy sabrosa, infusa en fe, por eso no sabe como lo aprendió, no lo pudiendo explicar, porque no cayó en sentido, sino en fe.

 

Seguro que la religiosa agustina entendió perfectamente lo que le dice acerca del frío, de las penitencias y de las mortificaciones, pero dudo que entendiera lo referente a la oración contemplativa hecha en pura fe.

 

San Juan de la Cruz, en Subida del Monte Carmelo dedica a este difícil tema todo el libro segundo que comienza con estas palabras: “En que se trata el medio próximo para subir a la unión de Dios, que es la fe”.

Pone a continuación la segunda canción, base de lo que va a comentar a lo largo de 32 capítulos que dice así: A oscuras y segura / por la secreta escala disfrazada, / ¡oh dichosa ventura!/, a oscuras y en celada, / estando ya mi casa sosegada.

 

Y comienza el comentario con estas palabras: En esta segunda canción canta el alma la dichosa ventura que tuvo en desnudar el espíritu de todas las imperfecciones espirituales y apetitos de propiedad en lo espiritual…. Por eso la llama aquí escala y secreta, porque todos los grados y artículos que ella tiene son secretos y escondidos a todo sentido y entendimiento… Por lo cual dice que iba disfrazada, porque lleva el traje y vestido y término natural mudado en divino, subiendo por fe… Y no solo eso, sino que va el alma tan encubierta y escondida y ajena de todos los engaños

 Del demonio, que verdaderamente camina, como aquí también dice, a oscuras en celada, es a saber, para el demonio, al cual la luz de la fe le es más que tinieblas.

 


miércoles, 1 de octubre de 2025

Gracias y favores. Maria Mercedes Diago Ceinos.

 

Vista general de Baltanás (Palencia).

Relato de una gracia muy singular recibida del Señor por mediación de Víctor Rodríguez a petición de mi marido y mía.

 

Me llamo María Mercedes Diago Ceinos y resido en un pueblo de la Provincia de Palencia llamado Baltanás y estoy casada con Juan José Nieto Carranza, vecino del mismo pueblo. Yo tengo una sobrina llamada Verónica Álvarez que ha pasado temporadas colaborando como voluntaria en la obra social y caritativa que lleva en Bolivia el que fuera en su día Obispo de Palencia, D. Nicolás Castellanos, lo que dice tanto a su favor, no sólo por tener sentimientos tan cristianos como por ponerlos por obra de forma tan sacrificada y tan ejemplar.

 

Pues bien, esta mi sobrina, que con ello demuestra sus sentimientos cristianos como miembro que es de una familia tan cristiana como es la nuestra, llegado el momento, se fue a vivir con un joven llamado José Sancho, sin casarse por la Iglesia, e incluso ni siquiera por lo civil.

 

Pasado el tiempo me dijo que iba a tener un hijo. Cuando tuvieron el hijo, en lugar de bautizarle a los pocos días de nacer, como es costumbre entre familias cristianas como es la nuestra, se resistía a hacerlo, y su única respuesta era esta: “Eso sucederá cuando tenga que suceder”.  Mientras tanto seguía sin casarse por la Iglesia y sin bautizar al hijo a pesar de que tanto sus padres como yo, no dejábamos de aconsejarla que regulara cuanto antes su situación…….




miércoles, 24 de septiembre de 2025

Testimonios. P. Jacinto María (II)

P. Jacinto de la Cruz.

1º. Deseo de la perfección

El que aspira a consagrarse por completo a Dios ha de tener deseos de santidad. “Los santos deseos son alas que impulsan a las almas a volar hacia Dios”.

Para santificarse no basta un simple deseo, sino que se precisa deseo vehemente, cierta como hambre de santidad. “Llenó de bienes a los hambrientos”. Pero hay que querer con voluntad decidida. El tibio, como dice el Sabio, también quiere, pero no con voluntad resuelta.

El deseo, dice San Lorenzo Justiniano, presta fortaleza y aligera el trabajo; por eso añadía, que desear ardientemente vencer, es ya casi haber vencido.

Lo largo del camino –de santidad- no está en el camino, sino en el corazón, esto es, en la voluntad resuelta de darse del todo a Dios. (A. 303).

Y Santa Teresa escribe: “Tener gran confianza, porque conviene mucho no apocar los deseos, sino creer de Dios que, si nos esforzamos, poco a poco, aunque no sea luego, podremos llegar a lo que muchos santos, con su favor; que si ellos nunca se determinaran a desearlo y poco a poco a ponerlo por obra, no subieran a tan alto estado”. (Vida, 13, 2).

La verdadera conversión de Víctor ha conllevado –Dios le concedió- deseo firme y eficaz de darse del todo a Dios. Dice en su Autorretrato: “Al cambiar de vida, de luz me llené. Gracia sobre gracia sobre mí derramó. Por eso todo cambió. Poco a poco me enamoró. En todo la Virgen medió”.(A. 6).

En unas palabras dedicadas a “La unión con Dios” añade: “Nos debemos mover por el amor de Dios, no por el nuestro que es egoísta. Para ello hay  que luchar por despojarse de todo cuanto llevamos dentro de nosotros de malo, y que es mucho. Cuando el alma no tiene ya apego a sí mismo,  entonces está ya unida a Dios”.



sábado, 20 de septiembre de 2025

Habla Víctor. Carta 4 a una religiosa agustina (II)

San Alonso de Orozco, fundador del primer
monasterio de Agustina Recoletas en Madrid.


En esta situación que parece no tener fe, unido a que del mundo nada la atrae, se siente miserable y desgraciada; solamente con el llanto se desahoga el alma, pero rara vez se tiene esa virtud. Se lloran amargamente los pecados, es verdadera humildad, es el Señor quien la pone en ella. Puede quedar contestada esa humillación que te pidió el Señor; nada mejor te puede suceder que estar inclinada a la humildad, es obra del Espíritu Santo, Hay que saber responder cuando es uno humillado.

 

Víctor fue manso y humilde de corazón y por eso tiene frecuentes alusiones a la práctica de la humildad para alcanzar la perfección cristiana, pues como dice Santa Teresa, “humildad es andar en verdad”, que es reconocer que todo lo bueno que tenemos, lo recibimos gratuitamente del Señor, y puso en práctica la tercera cautela contra el demonio de su maestro San Juan de la Cruz que dice:


 Es que de corazón procures siempre humillarte en la palabra y en la obra, holgándote del bien de los otros como del de ti mismo y queriendo que los antepongan a ti en todas las cosas, y esto con verdadero corazón. Y de esta manera vencerás el bien en el mal, y echarás lejos el demonio y traerás alegría de corazón. Y esto procura ejercitar más en los que menos te caen en gracia; y sábete que si así no lo ejercitas, no llegarás a la verdadera caridad ni aprovecharás en ella. Y seas más amigo de ser enseñado de todos, que querer enseñar aun al que es menos que todos”.



miércoles, 17 de septiembre de 2025

P. José Francisco Rodríguez. Desde la Orilla de Dios (1)

 

La creación del hombre por Miguel Ángel en la capilla Sixtina

Existen dos orillas: La orilla de Dios y la orilla del mundo. El que camina por la orilla del mundo, mira cara a este mundo, y el que camina por el camino de Dios, todo lo mira cara a Dios. El que camina por la orilla del mundo, aspira únicamente por los bienes terrenos que se pierden para siempre cuando se pierde esta vida. El que camina por la orilla de Dios, al tiempo que usa los bienes terrenos, según los deseos de Dios, aspira por los bienes futuros, que comienzan a disfrutarse cuando se pierde esta vida.

 

La vida puede enfocarse desde la orilla de Dios o desde la orilla del mundo. Enfocar la vida desde la orilla del mundo, es enfocar la vida bajo las máximas del mundo. El centro para los que enfocan su vida según Dios, es Dios, y como Dios es eterno, nunca perecen, sino que son eternos, como Dios es eterno. La vida de los que enfocan la vida desde la orilla del mundo, es una vida sin horizontes, pues la figura de este mundo pasa antes o más tarde, mientras que los horizontes de la vida de los que enfocan su vida desde la orilla de Dios, no tienen límites.

 

 

P. José Francisco Rodríguez. Desde la orilla de Dios

   P. José Francisco Rodríguez. Desde la orilla de Dios    

El día 27 de agosto cerramos en este blog la sección dedicada a “Florecillas”. Si algún testigo aporta alguna florecilla nueva, la daremos a conocer, pero ese espacio le vamos a dedicar desde ahora al P. José Francisco y a la difusión de sus escritos espirituales, por varios motivos:

 En primer lugar, porque fue el P. José Francisco Rodríguez el que, desde el momento del fallecimiento de Víctor, en que su hija Begoña le entregó sus escritos autobiográficos muy espirituales, comenzó a promover su Proceso de Canonización, convencido de su santidad.

 En segundo lugar, porque el P. José Francisco, siendo sacerdote carmelita, pasó por una crisis vocacional tan fuerte, que a punto estuvo de abandonar la orden y el sacerdocio, como reconoce públicamente en uno de sus escritos titulado “Una historia de amor” en que confiesa:  Es Víctor a quien debo mi conversión, ya que a partir de la fecha en que se arruinó, viendo lo inseguro que era lo terreno, buscó y encontró su seguridad en Dios, a quien se entregó del todo, cada vez de más a más hasta el final de su vida. Viendo yo entonces la vida tan santa que él llevaba después de su conversión y lo pecadora que era la mía, siendo yo religioso y él seglar, me hizo reflexionar, y así fue como el Señor se valió de él para que me convirtiera como él se había convertido”.

 En tercer lugar, porque el P. José Francisco enviaba a su hermano Víctor todos estos escritos espirituales inéditos, y siempre contó su aprobación.

 En cuarto lugar, porque este blog de Víctor quiere fomentar entre los lectores el deseo de que todos se animen a tener una experiencia de Dios a través de la oración y de la práctica de las virtudes, como lo hizo el Siervo de Dios Víctor Rodríguez, y a esta finalidad pueden contribuir eficazmente estos escritos, generalmente en forma de sentencias, como en “La imitación de Cristo” de Tomás de Kempis.

sábado, 13 de septiembre de 2025

Testimonios. P. Jacinto María (I)

San Alfonso María de Ligorio, Doctor de la Iglesia

Muy querido P. José Francisco en el Señor.

Perdone esta demora en corresponder a su amable carta. Ha sido porque consideraba que la “reflexión del biógrafo” toda ella (pag. 215), al apropiármela, era buena respuesta.

 

Ahora he pensado que podemos reflexionar sobre lo fundamental de nuestro hermano Víctor: Su entrega total a Dios.

 

Nos ayudamos de la doctrina de San Alfonso María de Ligorio (I BAC. 203) y de la biografía del P. José Vicente. Más que testimonio, pues no recuerdo más de lo que le envié, será comprobar su entrega verdadera al Señor.

 

Hablando San Alfonso María de Ligorio a los sacerdotes sobre los medios que hay que adoptar para entregarse por completo a Dios, dice que esta obligación no es solo para los sacerdotes, sino que abarca a todos los hombres.

 

Pues como dice San Juan Crisóstomo: “Él se nos dio sin reserva regalándonos su sangre, su vida, sus méritos; por lo que añade San Bernardo, “es justo que también nosotros nos entreguemos a Él sin reserva”. (Ab II BAC, 307).

 

Estos medios son:

-Deseo de la perfección.

-Intención de agradar a Dios en todas las cosas.

-Paciencia en los dolores y humillaciones.

-Conformidad con la voluntad de Dios.


miércoles, 10 de septiembre de 2025

Habla Víctor. Carta 4 a una religiosa agustina (I)

 

Real Monasterio de la Encarnación de Madrid
de Agustina Recoletas.

Alabado Jesucristo: Con alegría y satisfacción recibí tu extensa carta, que más parece una epístola. Como me pides que te conteste una vez estudiada, lo hago con mi buena voluntad, por si te sirve de algo.

Esa oscuridad e impotencia que tuviste, pertenece a la noche de la fe. Esta prueba puede ser tan prolongada y fuerte, cuanto Dios quiera elevar tu alma. Deber ser tal, que penetre en el interior del alma en sufrimiento continuo. En esa situación, ésta se considera que está abandonada de Dios; nada más lejos de la realidad, es una purificación pasiva que hace crecer secretamente en amor unitivo, fin único a seguir. Puede durar largas temporadas, años,  e incluso toda la vida, incluso puede poner Dios al alma en tentación de fe; esta se la puede llamar noche tenebrosa del espíritu.

 

Pocos directores espirituales podrían dar consejos tan acertados a la situación que le presenta esta religiosa agustina. Si víctor lo hace con tanta seguridad y claridad, es porque conoce muy bien la Noche oscura pasiva de la que habla San Juan de la Cruz y porque ha pasado por esa terrible prueba en su vida. Basten estas palabras de Víctor sobre su experiencia:

 

El Espíritu Santo de la mano me tomaba y todas mis miserias me mostraba. Tan miserable me vi, que solo llanto de dolor tenía, que si esto no tuviera, peor lo pasara. Aunque más duro fue, cuando me llegaron tentaciones contra la fe. Todo perdido lo veía, nada del mundo apetecía, y lo que verdaderamente amaba, se me escondía. Era este estado verdaderamente penoso. De una a otra parte me trasladaba, en todas, triste y desolado me encontraba, para pronto terminar a los pies del Sagrario. Allí llorando me consolaba”.

miércoles, 3 de septiembre de 2025

Testimonios José Martínez Marcos

 

D. José Marínez Marcos, vecino de Saldaña


No tuve la suerte de conocer en vida al Siervo de Dios Víctor Rodríguez, aunque es probable que nos viéramos más de una vez durante los doce años que vivió en Velillas del Duque, pues él se acercaba a Saldaña con cierta frecuencia, pero si tuve la dicha de recibir un folleto en el que se hablaba del inicio de su proceso de canonización en el que con brevedad se destacan sus virtudes.


Me llamó la atención que un varón nacido en Quintanadiez de la Vega, perteneciente a la “Villa y tierra de Saldaña” como yo, hubiese practicado  tantas virtudes, y me interesé en conocer mejor su vida, para, en la medida de mis posibilidades, seguir su ejemplo.


Gracias a él descubrí que Dios es nuestro verdadero padre, que nos ha dado la vida por amor, que está dentro de nosotros, que ilumina nuestra vida y que nuestro destino no es la muerte, sino la resurrección y la felicidad que dura para siempre.


A  veces buscamos a Dios en lo alto de una montaña, en la profundidad de un valle y no nos damos cuenta que está en nuestro interior. Para encontrarle tenemos que ir a lo más profundo de nuestro ser. Como si fuésemos a explorar una cueva, y al salir nos damos cuenta que hay otro mundo totalmente diferente, un mundo que no veíamos porque estamos centrados en cosas, a veces sin ninguna importancia.


Muchas veces damos valor a lo que brilla con la luz del sol, pero si el sol se nubla, pierde su brillo y por tanto su valor. Dios es la luz que no se agota, que ilumina el oscuro camino de nuestra vida. Dios esta ahí susurrando al oído, pero no le escuchamos.


Esto es lo que he aprendido gracias al Siervo de Dios Víctor Rodríguez y estoy tratando de ponerlo en práctica: Estar siempre atento a lo que Dios, luz verdadera, me ilumina a través de la oración.


Saldaña (Palencia) día 29 de julio de 2025


José Martínez Marcos