miércoles, 25 de octubre de 2023

Habla Víctor Carta a D. Javier Muñoz (I)

Castillo de La Mota de Medina del Campo.


Velillas del Duque, 6 de octubre de 1994

D. Javier Muñoz

Estimado Javier y familia: Después de la conversación con tu padre, intenté hablar con tu esposa, pero ni en la pastelería estaba ni contestaron al timbre.

Tal como suponíais, fue él quien me informó desde el primer momento de su situación. Incluso de que ella tenía un hijo drogadicto. Este fue el punto de partida de nuestra conversación. Le manifesté los inconvenientes que les podía crear a ambos, y sobre todo a él. Me prometió que lo iba a pensar bien.

Por lo demás, todo lo quieren hacer como cristianos. También me informó de que todos vosotros estabais contra su proyecto. Espero que haya reflexionado, aunque la verdad, a nuestras edades empieza uno a fallar, principalmente por la parte del cerebro.

Sé que tú, tal como indicaba, estuviste muy unido a él. Yo te pido que sea cual fuere su decisión, aunque os duela mucho a todos, no le dejéis solo. Es vuestro padre.

 

El Señor Muñoz, padre de Javier, al que Víctor se dirige en esta carta, había sido muy amigo de Domingo, hermano de Víctor, por lo que también Víctor le trató con frecuencia. Ambos habían sido militares y ambos eran socios de la “Asociación de cazadores de Valladolid”. Muy hábiles con las armas, les encantaba la caza en las épocas que estaba permitida.

Al quedarse viudo, entabló amistad con una viuda y estaba decidido a casarse con ella contra el parecer de todos sus hijos. Víctor también le advirtió caritativamente de los inconvenientes de ese matrimonio, pero pide a su hijo, que por caridad acepte la decisión que tome y le ayude y ame como lo ha hecho siempre. La razón principal es que se trata de su padre,  que por su avanzada edad, comenzaba a tener muchos achaques y debilidades.