sábado, 20 de abril de 2024

Florecillas. Perros salvajes

Perros rabiosos amenazando a personas.


Víctor contó a su nieta Raquel lo que le sucedió un día que decidió ir desde Velillas del Duque hasta su pueblo natal Quintanadiez de la Vega para visitar y compartir con sus amigos de infancia.

 

Para ir de un pueblo al otro por carretera, hay que subir de Velillas del Duque a Saldaña, allí pasar por un puente el río Carrión para luego descender a Quintanadiez de la Vega. La distancia es de unos ocho kilómetros y medio. Tendría que pedir un taxi o a algún amigo que le llevara. Pero hay un atajo atravesando el río Carrión junto a Velillas por unos maderos, siguiendo por Gallinas y Lobera hasta Quintanadiez que se reduce a la mitad.

 

Como era los primeros años de su estancia en Velillas, cuando aun podía desplazarse

a diario a pueblos cercanos para asistir a misa y se encontraba con fuerzas suficientes, determinó ir por el camino corto, pero al llegar a Lobera de la Vega, le salió una jauría  de perros que se abalanzaban contra él.

 

Víctor, en lugar de lanzarles piedras o de amenazarlos para defenderse, se detuvo con serenidad frente a ellos, pidió ayuda al Señor, y en su nombre hizo la señal de la cruz, e inmediatamente perdieron su agresividad y se alejaron los perros.

 

El nombre de Lobera indica que en tiempos pasados ese lugar fue guarida de lobos, pero hace más de un siglo que ni en Lobera ni en sus alrededores se han vuelto a ver lobos, y menos en manada, ni siquiera en los crudos inviernos con prolongadas nevadas apremiados por el hambre ¿De dónde salió esa manada? ¿Por qué lo permitió el Señor?

 

 

miércoles, 17 de abril de 2024

Habla. Carta a Raquel (II)

 

Raquel con sus abuelos Víctor y Asunción
el día de su ingreso en el Carmelo de Sabarís.

En la soledad del Carmelo, día a día irás creciendo en el amor. El Espíritu Santo te guiará en silencio divino que es como se manifiesta y en silencio tienes que poner el alma para escuchar el susurro divino. Así le escuchó el profeta Elías, cuando no le encontró en el viento huracanado y los grandes truenos.

 

La carta de Víctor a su nieta, es la de un director espiritual, y pocos directores espirituales encontraremos tan capacitados para dar consejos tan certeros. Basándose en lo que se dice en el Primer libro de los Reyes, capítulo 19, versículos 11 al 16, acerca de la visión que el profeta Elías tuvo de Dios, dice a su nieta que, “en la soledad del Carmelo, el Espíritu santo la guiará en silencio divino, que es como se manifiesta y en silencio tiene que poner el alma para escuchar el susurro divino”.

 

Efectivamente, en el libro de los Reyes se habla de que Dios le pidió a Elías que se pusiese de pie en el monte Horeb porque Él iba a pasar. Vino un viento huracanado que hacía trizas las peñas, pero en el viento no estaba el Señor. Después un terremoto, pero en el terremoto tampoco estaba el Señor. Después vino una brisa suave y Elías se tapó el rostro y oyó que Dios le decía: ¿Qué haces aquí Elías?

 

San Juan de la Cruz, su maestro, en Dichos de Luz y Amor, tiene esta sentencia que Víctor conocía muy bien: “Una palabra habló el Padre, que fue su Hijo, y ésta habla siempre en eterno silencio, y en silencio ha de ser oída del alma”.

 




sábado, 13 de abril de 2024

Testimonios. Hna. Eva María del Niño Jesús (II)


Eva María de postulante en las Carmelitas Descalzas de Sabarís.


 

Carmelo de Sabarís, enero 2013

 

Querido tío Juan Luis:

Siento no haberte podido escribir antes para felicitarte y enviarte la capellana de este año. Nuestra Madre se encuentra internada desde el 18 de diciembre por insuficiencia cardiaca con retención de líquidos que la producen serios problemas respiratorios, así que las ocupaciones son múltiples.

 

Ya me envió tío José el cartel que hicisteis de mi padre. Como dice una de mis hermanas de comunidad: se nota la mano de su tío Juan Luis.

 

El conocimiento de su santa vida está haciendo mucho bien y continuará ayudando a muchas almas. Mis hermanas le tenían por santo, pero no creían que lo era tanto. Que yo sepa aprovecharme del gran ejemplo que me dejó.

 

Un abrazo muy fuerte de parte de Raquel y mío. Ante el sepulcro de nuestro Santo Padre, (San Juan de la Cruz) pide para que a nosotras nos infunda su mismo espíritu.

¡Santo año de la Fe!

 

Eva María y Raquel María

Carmelitas Descalzas



miércoles, 10 de abril de 2024

Florecillas. Buen trato a los animales

Perros caminando por el campo con su dueño.

Víctor manifestó desde joven una delicadeza especial con los animales domésticos, que a su vez correspondían con gratitud a su trato. Ante él, se sentían protegidos, pues ni los maltrataba ni  los daba voces. Se dio el caso concreto con una vaca muy trabajadora, pero difícil de dominar, pues era muy agresiva e incluso peligrosa, y de vez en cuando embestía a los que la maltrataban, pero con él siempre se mostraba sumisa.

 

Cuando se dedicó a la avicultura, trataba a las gallinas con esmero y procuró conseguir los medios más modernos para evitar sus enfermedades y que los gallineros fueran confortables.

 

Pero donde se vio con claridad ese amor de Víctor a los animales, fue durante su estancia en Velillas del Duque, donde los animales, especialmente los perros, se acercaban a él con toda confianza.  En su hogar no tenía ni perros ni gatos, pero eran muchos los perros que se acercaba a él, y no porque les diese algo de comer, sino porque percibían su paz, y por eso se acercaban a él, incluso cuando le acompañaban sus nietos traviesos.

 

Víctor recordaba con regocijo la escena que se repetía con su nieto Ignacio cuando le llevaba de paseo hasta la orilla del río Carrión y un perro les seguía como suelen hacer con sus amos. Ignacio le lanzaba piedras y el perro corría a encontrarlas para cogerlas en la boca. El niño exclamaba admirado: “Mira abuelo, y se las come”. ¡Cómo disfrutaba Víctor con la ingenuidad de su nieto! 

 

sábado, 6 de abril de 2024

Habla Víctor Carta a Raquel (I)

Raquel y Carlos con sus abuelos Víctor y Asunción el día de su primera comunión.


¡Alabado sea Jesucristo! Querida nieta muy amada por serlo y por haber escogido el camino del Carmelo. Por tus cartas veo la alegría que tienes en tu corazón, que día a día sea este camino tu fin. A la soledad me fui a orar, en silencio me quedé, lo que allí pasó ni lo supe ni lo sé; pero sí lo mucho que gané.

 

Víctor no pudo disimular la alegría de que su primera nieta eligiera consagrar su vida al Señor, y además lo hiciera en el Carmelo, al que también el pertenecía, aunque como carmelita descalzo seglar.

 

La quería mucho por ser su primera nieta. Raquel, en un escrito para el homenaje que hicieron a Asunción algunos hijos y nietos para celebrar su primer cumpleaños después del fallecimiento de su marido Víctor, recuerda con emoción detalles que Víctor tenía con ella cuando la visitaba con frecuencia en su casa de Móstoles siendo niña. Jugaba con ella en casa, la sacaba a pasear, la montaba en los columpios, la llevaba a la catequesis, etc., y en medio de esas actividades, aprovechaba de forma natural para hablarla de que Dios la quería muchísimo, de que la Virgen María la protegía siempre, etc.

 

Ese amor a su nieta aumentó cuando eligió consagrarse al Señor en el Carmelo, lugar más apropiado para su santificación, pero no solamente por haber elegido ese camino, sino porque en ese camino había encontrado la verdadera alegría, la alegría que sólo Dios puede dar.