sábado, 11 de mayo de 2024

Ascensión del Señor

Ascensión del Señor al cielo´


Celebramos mañana la solemnidad de la Ascensión del Señor a los cielos, que por una parte puede suscitar en nosotros cierta nostalgia de su partida, como resalta Fray Luis de León en su famosa oda a la Ascensión, que comienza con esta estrofa:

 

¿Y dejas, Pastor santo,

tu grey en este valle hondo, oscuro,

en soledad y llanto;

y tú, rompiendo el puro

aire, te vas al inmortal seguro?

 

Pero, por otra parte, es fiesta de júbilo desbordante, porque en la exaltación de Cristo por Dios Padre, hemos sido exaltados todos, pues como dice San Agustín: “No se alejó del cielo cuando descendió hasta nosotros; ni de nosotros, cuando regresó hasta Él. Él mismo es quien asegura que estaba allí mientras estaba aquí. “Nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre que está en el cielo”. Esto lo dice en razón de la unidad que existe entre Él, nuestra cabeza, y nosotros, su cuerpo. Y nadie, excepto Él podría decirlo, ya que nosotros estamos identificados con Él, en virtud de que Él, por nuestra causa, se hizo Hijo del hombre, y nosotros, por él, hemos sido hechos hijos de Dios”.

 

San Lucas describe esta alegría diciendo: “Jesús los sacó hacia Betania, y levantando las manos, los bendijo. Y mientras los bendecía, se separó de ellos, subiendo hacia el cielo. Ellos se volvieron a Jerusalén con gran alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios” (Lc 24, 50-53).





No hay comentarios:

Publicar un comentario