miércoles, 9 de febrero de 2022

Palabras que Mons. D. Ricardo Blázquez Pérez, Cardenal Arzobispo de Valladolid, pronunció en la Apertura solemne del Proceso de Beatificación y Canonización de Víctor Rodríguez Martínez (III)

 


Mons. D. Ricardo Blázquez, Cardenal Arzobispo de Valladolid presidiendo el canto de la "Salve"
con  que se cerró la Apertura del Proceso de Canonización de Víctor Rodríguez.

 

“Yo me alegro mucho de participar en esta celebración, en esta Apertura solemne de la fase diocesana del Proceso de Beatificación y Canonización de nuestro hermano Víctor, de vuestro padre, porque por muchas vías, siempre buscó el acercamiento al Señor. Y pedimos también esta mañana, que el Señor, con sus signos, avale la petición que esta mañana solemnemente estamos haciendo aquí.

 

ABRIMOS EL PROCESO DE BEATIFICACIÓN Y CANONIZACIÓN CON LA ESPERANZA DE QUE PRONTO PODAMOS CELEBRAR LA FIESTA DE SU BEATIFICACIÓN, CON LOS SIGNOS QUE EL PAPA EVALUARÁ EN SU MOMENTO Y QUE SON, UNA ESPECIE COMO DE PUERTA ABIERTA PARA PROCEDER A LA BEATIFICACIÓN QUE PEDIMOS ESTA MAÑANA.

 

Bendecimos al Señor, porque en medio de la Iglesia, su Espíritu suscita personas de esta fisonomía espiritual y de esta talla espiritual, y también nosotros tenemos la obligación de poner de manifiesto que el Evangelio no queda en la interioridad, también se manifiesta y se revela en las formas de vivir de sus hijos.

 

En el momento de participar en esta apertura solemne, pidamos al Señor que pronto avale los signos, la santidad de Víctor Rodríguez, cercano a nosotros.

 

Cuando se trata de una proximidad temporal y geográfica, tienen una especie como de incidencia con mayor elocuencia las palabras y los hechos. Que Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz intercedan por nosotros”.

 

DESPEDIDA: “Ha sido una coincidencia feliz, el que la Apertura del Proceso de Beatificación y Canonización de Víctor, coincida justamente con esta fiesta tradicional en esta liturgia hispánica de Santa María de la Expectación del parto. Santa María de la Esperanza. Santa María de la O, con tanto amor, en la proximidad de la fiesta del Nacimiento de Nuestro Señor. Que Santa María nos proteja”.





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